«Lenguas fuera de control»

Al que en secreto calumnie a su prójimo, lo haré callar para siempre; al de ojos altivos y corazón soberbio no lo soportaré (Salmo 101:5, NVI).

-¿Te enteraste de que Cris tomó dinero del escritorio del profesor López?  -le preguntó Amanda a Brisa.

Brisa, con la respiración entrecortada, preguntó:

-¿Quién te dijo eso?

-Acabo de oírlo; todos están hablando de lo mismo -respondió Amanda.

Brisa frunció el ceño.

-¿Cómo sabes que es verdad?

-Escuché a José y a Rubén hablando. Ellos dicen que la vieron haciéndolo.

-Guau -susurró Brisa- ¡Eso es horrible!

Durante el almuerzo, Brisa le contó la novedad a Jésica.

-¿Sabes que Cris le robó dinero al profesor López?

-¡No! -chilló Jésica-, ¿La pescaron?

Brisa se encogió de hombros. Entonces, por el rabillo del ojo vio que el director de la escuela estaba observándola. Rápidamente, terminó su almuerzo y se retiró de la mesa. Más tarde, cuando los alumnos estaban cambiando de aula, Brisa vio a Cris siguiendo al director hacia su oficina. Brisa se mordió el labio. Entonces era verdad, pensó.

Al día siguiente, antes del culto matutino, el profesor López hizo un anuncio.

-Algunos rumores han estado circulando acerca de que una persona tomó dinero de mi escritorio -dijo-. Me gustaría detener estos rumores, ya que son falsos.

Brisa se dio vuelta para mirar a Amanda, pero ella evitó la mirada de Brisa.

-No guardo el dinero en mi escritorio. Espero que este chisme se detenga ahora mismo.

¿Alguna vez has repetido algún chisme sobre otro? Sé cauteloso: una vez que dices algo acerca de una persona, nunca lo puedes deshacer.

¡Brisa estaba tan avergonzada! No podía creer que había condenado a alguien sin averiguar la verdad primero.

¿Y AHORA?

¿Alguna vez has repetido algún chisme sobre otro?
Sé cauteloso: una vez que dices algo acerca de una persona, nunca lo puedes deshacer.

RECUERDA:
Mis ojos pondré en los fieles de la tierra, para que estén conmigo; El que ande en el camino de la perfección, éste me servirá.
No habitará dentro de mi casa el que hace fraude; El que habla mentiras no se afirmará delante de mis ojos.
Salmos 101:6-7